En el corto plazo, un oligopolista, al igual que cualquier empresa en
cualquier otra forma de organización del mercado, puede obtener una
ganancia, llegar al punto de equilibrio, o sufrir una pérdida. A largo plazo,
la empresa oligopolística dejará la industria a menos que pueda obtener
una ganancia (o al menos llegar al punto de equilibrio) al construir la
escala óptima de planta para obtener el nivel óptimo de producción a
largo plazo previsto.
Si se están obteniendo ganancias, otras empresas entrarán a la industria
oligopolista a largo plazo, y a menos que se impida o restrinja la entrada, la
industria no seguirá siendo oligopolista a largo plazo.